jueves, 27 de septiembre de 2012

Hablar como si no hablara, ver como si no viera, hacer como si no hiciera. Este es un modo de ausencia divina. Es cierto que cada día se libra una batalla para aquel que está comprometido con la Presencia, una batalla con el propósito de disolver lo que uno no es, y solidificar lo que uno es.

Respiro y sé
Respiro y sé

Hace 34 años tuve la suerte de venir a este mundo que siempre ha prometido dicha.